De una conversación con una viejecita sabia y simpática, que no es la de la foto.
―Todas las noches, cuando hago el examen de conciencia, ya apenas pienso en el pasado. Total, para qué, si no me acuerdo de nada. Desde hace algún tiempo sólo me examino del futuro.
―¿Cómo es eso?
―Como soy vieja y tengo poco futuro, me resulta más fácil echarle una ojeada y quitarle el polvo. Me pregunto si mi futuro se conserva joven o le han salido arrugas. Yo creo que tengo que conservarlo alegre y lustroso, ¿no le parece? De eso me examino antes de acostarme.
Hola! Saludos desde Alemania.
ResponderEliminarAcabo de oir una cuña publicitaria de la DGT en la radio (por Internet), y ¿sabe qué? Ahora la DGT me pide.... ¡que vaya a pie!
Me parto con esta gente. Ya sólo les falta hacer un anuncio que diga "mire, haga lo que quiera y ya está".
Me voy a la oficina. En Metro.
Sabia decisión, Bernardo tan sabia como la de la viejecita, me ha dejado sin habla.
ResponderEliminarQue sabiduria la de nuestros mayores Dios mío!!!
ResponderEliminarAtienda bien a esa viejecita, lo merece y mucho.
GRACIAS POR COMPARTIR
PD. Bernardo, eres un crack
Lo primero que me ha venido a la cabeza es el personaje de Merlín en las novelas de T. H. White, al cual solamente podía conocer el futuro de las personas, en lugar de su pasado y por ello era "profeta".
ResponderEliminarLa diferencia es que el Merlín se entristecía mientras que esta señora anima y trata de ver cómo mejorarlo.
En cierto modo, cuando nos examinamos de nuestras acciones, ¿no estamos tratando de sacar un futuro mejor para los que nos rodean y para nosotros mismo?
Espero que no sea una indirecta
ResponderEliminarNo, jovencita, no. No me lo permitiría. Muchas felicidades otra vez
ResponderEliminar¡Qué mujer tan sabia!
ResponderEliminarInteresante, la viejilla. Habrá que tomar nota.
ResponderEliminarPues eso anima un montón porque de lo vivido no tiene arreglo a no ser que seas un super-super y digas como uno que yo me se de una peli: no tengo de que arrepentirme. de esos no se si quedará alguno, lo dudo. Mirar hacia el futuro es una gran lección la de la viejita lo que podriamos llamar: Esperanza. Todavia puedo hacer algo por los demas y con esa sonrisa +. Adiosle
ResponderEliminarnunca me han gustado los examenes.
ResponderEliminarprefiero seguir rezando y esperar.
ya nos enteraremos si Dios quiere.