jueves, 31 de diciembre de 2015

A Nelson Mandela


Sin perdón no hay futuro


Querido Presidente Mandela: acaba de cumplirse el segundo aniversario de tu muerte y nadie se ha olvidado de ti. Al contrario, se multiplican los homenajes a tu figura. Políticos, hombres de Estado, activistas de todas las tendencias y credos, aún no salen de su asombro al recordar el gran milagro que consumaste en Sudáfrica a finales del siglo XX.
No hace falta que me corrijas: ya sé no fuiste tú solo. Debería remitir este correo también a Kobie Coetsee, Frederik de Klerk y al arzobispo anglicano Desmond Tutu, pero lo importante es que, entre todos, frenasteis el baño de sangre que parecía inevitable cuando se puso fin al régimen de apartheid y los negros recuperaron sus derechos civiles.
Habías abandonado la cárcel después de 26 años y diste tu primera rueda de prensa ante 200 periodistas llegados del mundo entero. Todos esperaban una soflama cargada de odio y afán de venganza, pero tú hablaste de reconciliación y de perdón. Era el 12 de febrero de 1990.
Tus palabras se tradujeron en hechos. Se nombró una "Comisión para la Verdad y la Reconciliación", encabezada por Tutu, con el lema: “Sin perdón no hay futuro, pero sin confesión no puede haber perdón”.
Aquella comisión invitó a que las víctimas revelaran en audiencias públicas, con la televisión en directo, los crímenes que habían padecido durante los años de la discriminación racial. Al mismo tiempo los autores de los hechos violentos podían también confesar sus delitos, y eran sus propias víctimas las que decidían concederles el perdón si consideraban que el arrepentimiento era sincero y que habían actuado cumpliendo órdenes.
El propio presidente de la comisión entendió que sólo el perdón permitiría alcanzar la plena reconciliación entre los sudafricanos. Y apeló a la fe, al sentido religioso y cristiano del pueblo de Sudáfrica. Era preciso curar las heridas de un país entero que sangraba desde décadas. Se trataba de no dejar ninguna cuenta pendiente. Algunos comentaristas occidentales dijeron que Sudáfrica fue durante aquellos meses un enorme confesonario. Tenían razón.
Se han escrito millones de páginas sobre este episodio de vuestra historia, que tuvo luces y sombras, desde luego. Yo no añadiré una palabra más. Sólo te pido hoy que nos eches una mano desde el Cielo. Ya sabes que en la Iglesia Católica hemos comenzado un año dedicado a la misericordia. El Santo Padre Francisco nos invita a abrir el corazón a la misericordia de Dios confesando nuestras culpas en el Sacramento de la Penitencia, a la vez que pedimos perdón a los hermanos que se sientan agraviados por nuestra causa.
De este modo también nosotros estaremos en condiciones de perdonar las ofensas recibidas, aunque esta segunda parte no resulte tan sencilla.
¿Eres consciente de que en aquí nos gusta más la venganza que la misericordia? Sí, amigo Mandela; somos un pueblo justiciero e iracundo. Exigimos que "los malos" se pudran en la cárcel, que sufran en sus carnes lo que suponemos que han hecho sufrir a otros. El "ojo por ojo" no parece superado en nuestra refinada sociedad.
Desde luego es preciso hacer justicia y cumplir las penas que impongan los jueces, pero tú sabes muy bien que, cuando hay una ofensa, se producen dos heridas: una en el agraviado y otra —seguramente más dolorosa— en el que agravia. Éste la sufrirá en su carne hasta que el perdón la cure y el olvido elimine la infección.
El Santo Padre nos pide que tengamos los brazos y el corazón abiertos, siempre dispuestos a perdonar y a confiar; que salgamos a mitad de camino, como el padre del hijo pródigo, para fundirnos en un abrazo con aquellos que se acercan, quizá tímidamente, a la casa que abandonaron hace mucho tiempo.
¿Te parece un sueño imposible? Tú salvaste a tu país poniéndolo en práctica. Sabías que "sin perdón no hay futuro", y que, sólo perdonando, el hombre se hace semejante a Dios.  

lunes, 28 de diciembre de 2015

Nana para un Rey


La Nana para un Rey, interpretada por la voz limpia y poderosa de Pasión Vega es uno de los villancicos que más me han emocionado siempre. Alejandra me envía esta versión de 2008.


Duérmete tesoro mío,
no tengas miedo de nada,
mi pecho combate el frío,
con tus manitas heladas

Calla que tras la colina
está la muerte acechando,
viene cargada de espinas,
cruces, fatigas y clavos.

Nana, para unos ojos morenos.
Nana, para mi estrella y mi cielo.
Nana, para un ángel recién nacido.
Nana, que se me ha quedado dormido.

Cuando ríes se ilumina
las ventanas de mi ser,
qué hermoso es dar luz divina
y qué delirio querer.
Yo estaré siempre a tu vera
sueña libre pastorcillo.
A la ea ea ea
¡qué penita de mi niño!

Nana, para unos ojos morenos.
Nana, para mi estrella y mi cielo.
Nana, para un ángel recién nacido.

Nana, que se me ha quedado dormido.

jueves, 24 de diciembre de 2015

Hoy pido un milagro pequeñito


Ya está aquí la Nochebuena, y mañana es Navidad. ¡Muchas felicidades!
A todos: a los que vamos a Belén y a los se quedan en el solsticio; a los Magos de Oriente y a las magas de Madrid; a los que votaron y a los que se abstuvieron; a los de Sánchez y a los de Díaz; a los de Mariano, a los de Albert y a los de Pablo; a los incendiarios y a los bomberos; a los del Benítez y a los de Mourinho…
Hoy pediré un pequeño milagro a los ángeles cantores de Belén: que nos golpeen en la cabeza con su varita mágica y borren de nuestra memoria unas pocas palabras, precisamente aquéllas que sólo se emplean como disparos para insultarnos los unos a los otros; que suframos una epidemia universal, una amnesia colectiva que cancele de todos los diccionarios y de la vida pública y privada las injurias, las descalificaciones, las procacidades, las ofensas verbales.
Y ya, metidos en milagros, que revivan en las hispánicas seseras aquellos encantadores vocablos que utilizaban nuestros bisabuelos para cortejar a nuestras bisabuelas; y que vuelvan las viejas expresiones de cortesía que no sólo empleaban los nobles, sino también el pueblo llano; que se enriquezca de nuevo el lenguaje de esta tierra, cada vez más empobrecido y sucio, y aprendamos a ponderar las virtudes del prójimo, a dar una salida al discrepante, a ser cordiales y gentiles, con palabras y con silencios, en la familia, en el bar, en el parlamento y hasta en la tele.
¿Quién dijo que las palabras no importan? Lo son todo, amigos. Con ellas amamos y odiamos; ellas cargan las pistolas y encienden el rencor.
Hoy la primera Palabra del Padre, el Verbo, se encarna en María y nace en Belén. ¡Paz a los hombres de buena voluntad!

miércoles, 23 de diciembre de 2015

Ha fallecido Jesús Jiménez

 Oratorio de Tigaday, el centro donde don Jesús celebró su última Misa
Hace apenas ocho meses, en plena Semana Santa os pedí desde Las Palmas que rezarais por un sacerdote de la Obra que estaba enfermo en la isla. Acababan de diagnosticarle un tumor muy agresivo y el pronóstico no podía ser más pesimista. Entonces no dije el nombre; era don Jesús Jiménez Juárez, y ha fallecido esta mañana.
Don Jesús siempre fue hombre de pocas palabras, recio y valiente como buen castellano. Yo estuve con él dos o tres veces cuando ya conocía el alcance de su enfermedad. Hablamos poco, pero su sonrisa inalterable lo decía todo. Está en el Cielo y desde allí brindará con sus hermanos y con sus amigos en Nochebuena; pero seguiremos rezando por él y con él.

martes, 22 de diciembre de 2015

Paseos por Gijón (I)


 
Cuando vengo a  Asturias, mi excursión preferida siempre es urbana. Ya tendré tiempo de visitar las aves de Villaviciosa y el balcón de "El Fitu", que es uno de los collados más famosos de la Sierra, desde el que se divisa medio Planeta y se adivina el resto.
Vestido de paseante anónimo y con los prismáticos al cuello, por si las aves, me adentro en la villa de Gijón, cuyo nombre, al decir de Unamuno, proviene del latín, "saxum" (roca). Un poco forzado parece, pero me gustaría que fuese verdad.
La calle Uría está en el centro mismo de la ciudad. Camino despacio mirando todos los escaparates. Las tiendas están menos animadas que otros años. Se conoce que este año tampoco ha tocado el gordo y la crisis no se va.
Junto a una sidrería hay un paisano a la espera de algo o de alguien. Luce un cigarro en la boca, que oscila rítmicamente de arriba abajo como un metrónomo.
—Nunca he pasado tanto frío como este año…
Lo he dicho en voz muy baja, pero sé que me ha oído el tipo del pitillo. Confieso que me gusta provocar para iniciar una conversación, y tengo un sistema es infalible: no pregunto nada, porque corro el riesgo de que me respondan y se acabe la charla. Prefiero hacer un comentario insólito como éste y ver qué pasa.
—Usted no es de aquí, ¿verdad?
—No. Vengo de Madrid.
—Pues para frío, el de su tierra. Aquí en Asturias nunca hace frío. Todo lo más, "re-fres-ca". Y este año andamos bien con el cambio climático.
La conversación meteorológica apenas aguanta dos o tres frases más. El paisano tira el pitillo y vuelve a entrar en la sidrería.
Más recorrido tiene mi encuentro con un chaval de 14 años que chatea convulsivamente con su IPhone apoyado en un parquímetro. Le digo que su teléfono es un poco antiguo, y salta como una pantera:
—Es el último IPhone. A ver si te enteras…
El acento despectivo me confunde:
—Tú no eres de aquí.
—Soy de Madrid, pero mi abuela vive en Gijón y me ha regalado el teléfono.
—¿Y has votado por correo?
—No dejan votar hasta los 18 años…
—¿En serio que no los tienes todavía?
El chaval me mira receloso:
—Claro, tío. Voy a cumplir quince…
Luego me cuenta que estudia en los jesuitas, que ha tenido dos novias, pero ahora se lo pasa mejor jugando a basket, que de notas va regular, que va a Misa casi siempre y que…,
—Oye, ¿tú eres cura o algo así…?
—Bingo, chaval…

miércoles, 16 de diciembre de 2015

Tajamar se supera..., otra vez


Este año el coro de Tajamar canta con "Los secretos". Y lo bordan.

domingo, 13 de diciembre de 2015

Comulgar en el frente de batalla


 
Loreto me regala esta fotografía elocuente y bellísima.
Fue tomada en 1945, en uno de los escenarios bélicos más sanguinarios de toda la Segunda Guerra Mundial. Estamos en la isla japonesa de Iwo Jima, el 3 de marzo de 1945.
En la cima del monte Suribachi de esa isla, el 23 de febrero del mismo año, a los pocos días del inicio de los combates, el periodista Joe Rosenthal tomó una de las imágenes más difundidas de la Segunda Guerra Mundial. La tituló Raising the Flag on Iwo Jima, y se ve a varios marines empujando el mástil con el que erigieron la bandera estadounidense en aquel lugar.  
Unos días más tarde el mismo fotógrafo captó esta otra imagen. He querido colgarla del globo como recuerdo y desagravio por el infame sacrilegio eucarístico cometido en Pamplona del que ya habéis oído hablar.


Dentro de tres días veré este Belén



Me cuentan que en Solavieya ya lo han puesto. Y se superan cada año. 

viernes, 11 de diciembre de 2015

Más "Pentatonix"


Estos chavales son increíbles

jueves, 10 de diciembre de 2015

María, ¿sabías...?

Con más de cinco millones de vistas en pocos días, el videoclip de la canción “Mary, did you know?” interpretada a capella por el grupo Pentatonix revoluciona YouTube y recuerda el verdadero sentido de las fiestas navideñas.
Hace menos de un mes, las cinco voces de Pentatonix lanzaron su nuevo disco navideño “That’s Christmas to me”, y en pocos días, el videoclip se ha convertido en un éxito viral.
El autor de la letra, cuya traducción reproduzco más abajo, es el norteamericano Mark Lowry.


María, ¿sabías que tu bebé caminaría un día sobre el agua?
María, ¿sabías que tu bebé salvaría a nuestros hijos e hijas?

¿Sabías que tu bebé vino para hacerte nueva?
Que ese niño que tú diste a luz, pronto te traería a la Luz

María, ¿sabías que tu bebé dará la vista a un hombre ciego?
María, ¿sabías que tu bebé calmará una tormenta con su mano?

¿Sabías que tu bebé ha caminado por donde los ángeles pisaron?
Que cuando besabas a tu pequeño besabas el rostro de Dios.

¿María, sabías? ¿María, sabías?

Los ciegos verán, los sordos oirán
Los muertos volverán a vivir
Los paralíticos saltarán,
Los mudos hablarán las alabanzas del Cordero.

María, ¿sabías que tu bebé es el Señor de toda la creación?
María, ¿sabías que tu bebé gobernará un día las naciones?

¿Sabías que tu bebé  es el Cordero Perfecto del cielo?

Que el Niño dormido que sostienes es el Gran YO SOY

miércoles, 2 de diciembre de 2015

Primera lección de Teología Civil


Me envían desde Santiago este artículo de Xosé Luis Barreiro, "por si le sirve para el blog". Desde luego que me sirve. Sólo espero que todos los lectores entiendan que es sólo una broma.
Si las mareas ofrecen bautizos y comuniones civiles, no queda más remedio que hacer una teología civil, porque no sería honrado usurpar estos ritos de paso sin asumir sus obligaciones. Los aspectos formales de esta boutade ya los despachó Roberto L. Blanco con extraordinario rigor y valentía. Pero dado mi afán de colaborar en la felicidad del pueblo, no puedo resistirme a sentar los fundamentos de una teología atea que ayude a ritualizar la civilidad.
Empezaremos por decir que si el bautizado es un bebé, habrá que tener padrinos civiles que respondan por él. Pero si el bautizado es adolescente habrá que exigirle un catecismo civil que garantice que la víctima sabe dónde se mete. «¿Eres totalmente laico?», preguntará el alcalde. «Sí, por la Gracia de Dios». «¿Qué significa el bautismo civil?», insistirá el oficiante. «Ser discípulo de usted y seguir sus ordenanzas». «¿Y quieres ser bautizado?». «Sí», responderá el crío. Y ya se le puede bautizar con agua con gas, para diferenciar esta ceremonia de la credulidad fanática de los católicos. Claro que después del bautizo hay que socializar al niño, que ya de pequeñito deberá rezar civilmente: «Alcaldito de mi vida, fuiste niño como yo, por eso te voto tanto y te doy mi corazón». O «Cuatro esquinitas tiene mi cama, cuatro municipales que me la guardan».
Más complicada será la comunión civil, porque, antes de recibirla, el interfecto, de 9 años, tendrá que confesarse con un funcionario, decirle si respetó los semáforos y los pasos de cebra, y cuántas papeleras volcó. Porque la confesión es esencial para el control del comportamiento y la ortodoxia laica, y solo los niños absueltos y con la penitencia cumplida podrán entrar en María Pita vestidos de blanco, y cantando: «Vamos, niños, al plenario, que el edil llorando está, pero viendo tantos niños muy contento se pondrá». Será entonces cuando el oficiante, recordando las campañas electorales, repartirá bocatas de jamón entre los niños, para que aprendan a compartir y a formar un cuerpo místico municipal.
La confirmación civil será el momento elegido por los niños para mandar al carajo al alcalde e iniciarse en el botellón. Pero todos sabrán que el que no se confirme civilmente no podrá acceder a ninguna de las opciones de matrimonio que ofrecen los poderes civiles. La lógica llevará a que los miembros de la corporación, en vez de prometer su cargo, sean ordenados concejales. Porque si no se ritualiza todo, los niños percibirán el juego y no se dejarán bautizar. Y lo más fácil, creo, será la extremaunción laica, que será una rebaja en la tasa de tanatorio para enfermos civiles desahuciados.
Con estas bases ya podemos empezar a hacer el payaso y a mostrar la rabia que produce el último reducto de autoridad moral no estatalizado. Y esperemos que Dios nos ayude a soportar tanta iniquidad. 


martes, 1 de diciembre de 2015

Navidad con toda la familia

No es necesario saber alemán para entender este precioso vídeo que me envía Mariano. Espero colgar otros semejantes como preparación para la Navidad