miércoles, 27 de julio de 2011

El confesonario mágico


El armario mágico de Narnia 
La tienda de campaña que instaló la familia Weasley en una de las aventuras de Harry Potter podía medir, vista desde fuera, dos o tres metros cuadrados como mucho. Sin embargo cuando uno pasaba al interior, por arte de magia, se convertía en una mansión enorme con todas las comodidades.
Los fabricantes de automóviles sueñan con conseguir algo parecido: un vehículo diminuto por fuera y enorme por dentro que desafíe las normas de la geometría. Algunas veces incluso se dejan llevar por la imaginación y aseguran en la publicidad que han logrado el milagro.
Hasta hoy yo pensaba que estas historias pertenecían sólo al mundo de la fantasía. Pero esta mañana…
Llego al Colegio Mayor Zurbarán y observo que en la capilla hay dos clásicos confesonarios exentos, como armarios enormes de una iglesia tradicional.
Al acabar la Misa pregunto en cuál de los dos podré ponerme a confesar. Entro en el de la izquierda y nada más abrir la puerta se produce el milagro: es un habitáculo increíblemente amplio con una mesa, un sillón, estantería, aire acondicionado, un perchero, y, al fondo, otra puerta. La abro con cierta aprensión y descubro un cuarto de baño completo.
Me han venido a la memoria el armario mágico de las Crónicas de Narnia.
Al terminar las confesiones, salgo de la mansión penitencial y vuelvo a observar el confesonario desde fuera. Lo dicho, un simple armario con cierto empaque.
Supongo que se trata de magia o de una extraña parábola cuya moraleja trataré de encontrar en otro momento.
No me preguntéis por qué lo cuento aquí. Tampoco yo lo sé.


14 comentarios:

Cordelia dijo...

¿Ha mirado qué hay en el lado del penitente? Es por ir yo... Pero claro, si hay instrumentos de tortura medieval o el foso de las serpientes, igual me lo pienso.

Relicary dijo...

A mi lo primero que me viene a la mente es pensar que el confesionario es el despacho del sacerdote, y como tal debe de estar equipado. En ése podrá confesar y dedicarse al mismo tiempo, durante los ratos sin penitentes, a hacer otras cosas de estudio, trabajo o simplemente rezar. Más recogimiento.

Altea dijo...

Entonces voy entendiendo el comentario de aquella aldeana, cuando oyó decir a unos turistas que la ermita de su pueblo era muy pequeñita: "Pero por dentro es bien grande", respondió.
Si algún día voy por allí, preguntaré si puedo ver la "mansión penitencial". Parece digno de ver.

Bernardo dijo...

Jajaja "mansión penitencial"

Hoy me llevo el portátil de la oficina a la playa. ¡Rece para que no me lo roben, que no es mío!

Anónimo dijo...

Es evidente por qué lo cuenta, por favor promocione la marca en la "región". También las penitentes sufrimos de ver a los capellanes en "la checa".......


Un saludo

Gonzalo GY dijo...

Efectivamente, bonita parábola. Y es que esa pequeña constucción de madera que se alza en la semipenumbra de un rincón del templo encierra lo más grande.

Papathoma dijo...

Me gusta ese modelo narniano de confesonario. Cuando veo cómo son los de la mayoría de las iglesias -muy antiguos, eso sí- me parecen más cámaras de tortura que otra cosa.

Ahora falta que lo hagan un poco cómodo también por el otro lado, para las sesiones largas.
Es broma. O no.

DAVID DIAZ CRIADO dijo...

Me encanta la foto del armario de Narnia, aunque normalmente suele ocurrir al reves, es decir: por muy grande que te compres una casa o un coche o un armario al final se te acaba quedando pequeño..ja.

Antuán dijo...

Pues el de mi pueblo es tambien asi de presentación al principio el curita entraba pero dejo el armario y se sienta en el banco a esperar antes de Misa con alba y todo que está bien pero eso... ¿de adorno, o que? Me alegro que lo vayan pensando en ponerlo facil. La semana pasada fui a Ciudad Real a confesame porque si mientras mi madre dormia, cogi la viajera de las 7 y a la vuelta me dice Tomas el del bar: donde sea". ¿donde ibas esta mañana de madrugada? Ya ves . -Jo m. Adiosle.

Antuán dijo...

Vila ¡Gracias por rezar por mi madre! está mal pero no tanto estuve con ella este mes pasado y mientras yo regaba el patio y las macetas ella lleva el rosario. Dice que no sabemos lo mal que está pero esta casi siempre acompañada donde la pones alli te la encuentras. y perdonar que escriba tan deprisa asi hablo no se si mi acompañante de asiento se enteró de algo o pensó que me jeringué. es todo. Pero esque hay que aprovechar cualquier ocasión. Adiosle

Vila dijo...

Muy bueno lo de "mansión".
Me alegro que al fin algún ingeniero se haya estrujado la sesera y les permitan algo más de comodidad. Pues la penitencia es para el penitente... supuestamente, que ya sé que nos ayudan siempre.

Bernardo, ánimo con tu curro, y disfruta de la family lo que puedas a tope, o lo que te dejen.

yomisma dijo...

Lo malo de tanta comodidad es si algún día le da por disfrutarla... La espera penitencial entonces si que será eterna.

Anónimo dijo...

Yomisma: ahí está el secreto de encontrar la virtud en el justo medio, aunque quizá lo mejor es que el control del aire se maneje desde fuera. Verás qué rápido avanzará la fila y qué propósitos de enmienda

Anónimo dijo...

!!!!Y lo ha puesto ahí porque le vamos a pedir los planos!!!!
Un abrazo