miércoles, 13 de noviembre de 2013

En el Cielo y en la Tierra


―¿Va a hablarnos del Cielo?
―Sí. El segundo día del curso de retiro nos toca hablar de las postrimerías. También del Cielo, claro.
―¿Y qué nos va a decir?
―Aún no lo sé. Cualquier cosa que diga será pobre, inexacta y hasta un poco ridícula. Ya sabes lo que escribió San Pablo: “ni ojo vio, ni oído oyó, ni pasó por mente alguna las cosas que Dios tiene preparadas para los que le aman”.
―Pero puede explicarnos a qué se parece el Cielo. Usted tiene imaginación.
―¿Más que San Pablo?
Mi interlocutora no contestó, pero me sirvió la sugerencia. A última hora de la tarde he dedicado treinta minutos a jugar con la fantasía del modo más descarado. El Cielo se parece…, a un viaje sin fin, a un banquete, a un baile, a un acto de amor eterno, a un juego, a una sinfonía, a una tertulia, a un poema perfecto… Al terminar, no he sentido vergüenza como otras veces. Al contrario. Sé que me he quedado muy corto.
En el telediario de la noche siguen mostrando imágenes de miles de muertos en Filipinas. Es una tragedia terrible para los que han sobrevivido, y hemos de procurar aliviarla entre todos. Si no existiera el Cielo, el mundo no tendría sentido. ¡Cuánto me gustaría ahora asomarme a la gran fiesta de los que acaban de llegar a la Gloria!

10 comentarios:

Hexamamá dijo...

-¿Y tú quieres ser bueno, como Jesús?
-Sííí...
-¿Y por qué quieres ser bueno?
-Para ir al Cielo.
-Muy bien. Y el Cielo, ¿qué es el Cielo?
-El Cielo es... Dios, por dentro.

(Un chaval Down, en catequesis de Primera Comunión).

Merche dijo...

¡Cuánto hay que aprender de los niños!

yankee dijo...

Aaaaaay el Cielo..... Qué intriga!

Almudena dijo...

Bufff eso de Dios por dentro sí que da para pensar. Gracias por compartirlo

Antuán dijo...

Las imágenes impresionantes, esperemos que Dios estuviera esperándoles en el cielo. Adiosle-pido

yomisma dijo...

Ese niño tiene la Sabiduria. Yo quiero ser su amiga y aprender de él.

Patty dijo...

Mi cielo está lleno de nubes de algodón que son como amas elásticas por las que van los ángeles. En el centro está Dios y a su lado la Virgen, que se pasea por ahí sonriendo y desprendiendo una luz difícil de olvidar. Mi cielo es mucho más que esto, pero no me salen las palabras para expresarlo, pero es bueno, bonito y caro, pues no es muy fácil entar en él, pero yo espero conseguirlo.

Anónimo dijo...

Pienso que las personas podemos dar un sentido a esta vida sin necesidad de creer el cielo. Dar un sentido o encontrar un sentido o buscar un sentido. Muchos vivimos esta vida sin pensar que sea un absurdo sin sentido y sin creer en el cielo.

Incluso hay quienes han vivido como un infierno la inhumanidad de algunos supuestos hombres de Dios.

Por cierto, que queremos decir cuando hablamos de que la vida tenga un sentido?

Ateniense


Ana dijo...

Preciosas Palabras Pater: Felicitaciones !!!
Dios siempre pone en su boca palabras de sabiduria, de Vida Eterna...
Dios mediante todos llegaremos al Cielo algun dia, mientras tanto con los pies parados sobre la tierra, trabajando y confiando plenamente en El...
Gracias D.Henry por sus palabritas de todos los dias: nos hacen mucho bien...

Juanma Suárez dijo...

Don Enrique, como siempre, llego tarde a esta entrada. Hace algunos meses escribí en mi página un par de entradas sobre esto (con menos claridad que usted, por supuesto), pero tratando también de explicar algo que yo tengo bastante claro: que tenemos momentos en la vida en los que podemos vislumbrar algo de lo que puede ser el cielo (espero que no le importe que ponga los enlaces, pero puede eliminarlos si lo cree oportuno):

http://lahipocondria.com/?p=1363
http://lahipocondria.com/?p=1463

En cuanto al "Anónimo", por supuesto que hay mucha gente buena que no cree en el cielo o en Dios; muchísima. No olvides, por otro lado, que "los hombres de Dios" siguen siendo hombres, con sus defectos, sus miserias y sus virtudes; pero que yo sea mala persona no significa que mi padre lo sea, por más que yo sea hijo suyo, no sé si me explico.

En cuanto a lo de dar sentido a la vida o que una vida tenga sentido..., bueno, supongo que es algo que cada cual debe tratar de averiguar. Lo que está claro es que nacemos con una serie de cualidades que se nos han dado para compartirlas con los demás; eso debería ocuparnos para dar sentido a la vida.

Si sólo crees en la vida, lucha por darle sentido a tu vida. Los que creemos también en el cielo y el infierno sólo nos diferenciamos de ti en que también le buscamos sentido a la muerte, y, por ende, al dolor, al sufrimiento, a las desgracias... y para nosotros, como diría "Gladiator", "lo que hacemos en esta vida tiene su eco en la eternidad".