jueves, 12 de septiembre de 2013

Arréglalo tú mismo (y VIII)

Termino esta serie sobre bricolaje motorizado con tres pequeñas joyas 


 Como es sabido, los niños necesitan ir sentados en un asiento especial. El dueño de este vehículo lo ha tenido presente y ha puesto en juego toda su creatividad.


La escobilla izquierda de este automóvil ha desaparecido y la derecha no funciona. ¿Qué haremos?


Francamente, no entiendo para qué sirve esa escoba

4 comentarios:

Antuán dijo...

El asiento de tijera para el niño es un poco peligroso sin cinturón de seguridad téngalo en cuenta por si le para la guardia civil. Adiosle

Todoslosnombres dijo...

Ya dejé de conducir y ahora me conduzco con tracción animal (un rato a pie y otro andando)pero prepararé un fichero con todas las soluciones que nos ha ido presentando y lo regalaré, con permiso del autor, a amigos y familiares.

Gracias por sus letritas que también nos enseñan otras formas de arreglar las cosas.

Papathoma dijo...

¿La escoba?
Ingenioso método para limpiar las telarañas del garaje al más puro estilo masculino (= de una manera práctica y cómoda). Mmmm....este invento a lo mejor sí que lo copio.

Juanma Suárez dijo...

Yo creo, don Enrique, que al virtuoso dueño del coche con la escoba, algún amigo de lo ajeno le pillaría prestada, sinne die, la antena de su vehículo.

Es sólo una idea de lo que puede ser. Tal vez, si es así, con esa grandiosa antena, pille las conversaciones de la NASA con sus astronautas...