Me
anuncian que algunos grupos de viajeros llegados de todo el mundo para la
beatificación de don Álvaro, vendrán a Molinoviejo durante los próximos días
para visitar la ermita, la casa antigua, el viejo oratorio y las habitaciones
que ocuparon San Josemaría y don Álvaro.
Esta
casa sigue viva; no es un museo ni un santuario. Ahora mismo la ocupamos un par
de sacerdotes, que atendemos sendos cursos de retiro de mujeres; pero en cada
rincón se adivinan las huellas de muchos santos.
Escribo
estas líneas en la mesa que sirvió a don Jesús Urteaga para escribir "El
valor divino de lo humano", y dentro de unos minutos haré mi oración junto
al precioso Sagrario que encargó el Fundador de la Obra como primera piedra de la casa de retiros.
Es
natural; si yo viviera lejos de aquí, también pasaría por Molinoviejo.
9 comentarios:
Yo tambien lo veo bien. Hay que aprovechar el viaje. Esto no se da todos los dias. Adiosle
¡Estupendo!
Podría hacer de guía...y contarles alguno de sus recuerdos al hilo de lo que vayan viendo.
Menuda responsabilidad la de estar frecuentemente en Moñino Viejo. Diría San Josemaría que con uno que se confiese habrá valido la pena, lo que sigue es mío, el jaleo
Y viviendo cerca, aún mas.
Tengo unos amigos filipinos que viven en Dubai y que en unos días pasarán por ahí. Cuídemelos, no sabe lo ilusionadísimos que están.
Entré en Pozoalbero y me emocionó sentir que ahí estuvo San JoseMaría. Tanto como el imaginarme a familiares míos que ya no están aquí y que disfrutaron de retiros allí.
anotado, ir a Molinoviejo y visitar el Oratorio. Usted estará de viaje, seguro...
Una suerte tener tan cerca momentos vividos de los santos... Q suerte vivir allí!!
Don Enrique:A mi también me gustaría estar y conocer Molinoviejo,llevo haciendo "cola" cuarenta años,le voy a tener que pedir"recomendación."Este curso voy a poner "Toda la carne en el asador"para conseguirlo.Mil Gracias
Alobel, es muy fácil: dile a Vila que te apunte a un curso de retiro y allí estarás. Ahora, turismo poco....
Publicar un comentario