Hoy han comenzado las clases en Gaztelueta. Mi colegio ya es sexagenario y dentro de unos días lo celebrarán como corresponde. De momento hay que poner en marcha el curso 61. Los chicos, recién lavados y planchados lucen carita de maniquí, sección infantil, de El Corte Inglés. Con su uniforme nuevo, sus libros de colores y sus enormes mochilas alborotan como bandadas de estorninos junto a la entrada del chalet.
También las madres sonríen un poco más que de costumbre y se intercambian besos, abrazos y gritos de entusiasmo. Cualquiera diría —y con razón— que estaban hartas de tener a los niños en casa.
Son las diez de la mañana. Salgo del chalet y atravieso la multitud camino de mi coche. Oigo una voz a mi espalda:
—¿Es usted el nuevo capellán?
—No, señora; yo soy un alumno.
Y ante la cara de asombro de la buena mamá, me veo obligado a aclarar las cosas.
—Vine aquí hace sesenta años…, y ya ve; sigo intentando que me aprueben.
La señora sonríe, y un insecto de diez o doce años que está a su lado, exclama:
—¡Qué pasada!
17 comentarios:
Jejeje, las madres sonríen más y algún que otro profesor tendrá el gesto más hosco que de costumbre.
Espero que el pequeño zagal no se haya creído que puede estar 60 años para aprobar todos los cursos ;)
Sigo teniendo presente sus intenciones.
¡Buenos días a todos!
¡Ja, ja, el chaval pensará lo difícil que es aprobar entonces en Gaztelueta y lo que se le viene encima, pobre!
Por cierto, ¿qué quiere decir "Gaztelueta"? ¿Es un sustantivo? ¿Un apellido?...
Gaztelu = castillo. Lugar de castillos, supongo.
"Cualquiera diría —y con razón— que estaban hartas". Hartas no sé pero con una ilusión inmensa!!!
Cada año por estas fechas siempre pienso por sufragar- en un futuro- un monumento a los profesores (a los buenos, se entiende).
Ahora contando los días que faltan para que salgan a las 5!
Seguimos encomendando.
Yo dejaré a mi pequeñona por primera vez en el cole el próximo lunes... El primer día de cole es emocionante.
Sigo rezando por ustedes.
Aquí la ilusión nos ha durado un solo día: ayer, segundo día de colegio, no hubo clases debido a las inundaciones. Ya veis que en las Américas cuando llueve jarrea...
Aunque no corresponda el tema a la entrada de hoy sino a la de hace un par de días, yo también quiero dar gracias por las cosas pequeñas de cada día: Gracias Señor por el pan con aceite, por la fruta de verano, por el agua caliente de la ducha, por una cervecita fresca cuando tienes la garganta seca, por la tortilla de patatas y por las lentejas de mi madre, por el invento del antifaz para dormir, que evita que la luz me despierte antes de tiempo y por el de las lentillas, que me permiten pintarme el ojo sin tener que atravesar el espejo...
¡Gracias, Dios mío, por Tí mismo, aunque eso no sea algo pequeño!
Sigo encomendando sus intenciones y también la operación de Santiago (se llama como mi hijo) que pedía un Anónimo. Espero que saliera todo bien. Saludos.
Mis niñas llevan 4 días de cole. La pequeña ya se ha tenido que quedar hoy en casa, está afónica como un grajo y presenta otros síntomas desagradables que no voy a describir. ¿La foto es de su cole? Es una preciosidad de edificio, y de jardín y de todo.
Ofreciendo el trabajo de hoy, un abrazo
¡Eso, eso, anónimo: un monumento a los profesores! Y valorar nuestro trabajo y desgaste...
Monse
Debo de ser rara. A mí la vuelta al cole me gusta tan poco como a las niñas y los días previos tengo que hacer esfuerzos para no poner su misma cara de pena.
Los horarios me parecen excesivos, por no hablar de la cantidad de horas que deben pasarse sentados y en silencio (y atentos, claro).
Menos mal que nuestro cole es estupendo, los profesores se vuelcan y hemos conocido allí a gente estupenda, que sinó...
Y tanto que es una pasada!... mi colegio el de aqui de Madrid donde apenas empecé mis estudios que no terminé... necesitaba trabajar. La escuela si la del pueblo... pero que pueble, pues si pasa algo. es como presumir ser de Bilbao pues yo como soy de la Mancha no mancho a nadie solemos decir alli. lo que decia la escuela ahora es insti. no esta mal. y eso es todo. Adiosle.
Cordelia, éste es el chalet en el que comenzó el colegio. Con los años fueron creciendo otros edificios alrededor. Ahora el viejo caserío sirve como residencia de profesores y sede de la administración central.
No lo conocía, es un caserio precioso.
¡Muchas felicidades por esos sesenta años!
Ud sabe el cariño que tengo a estos colegios, aunque de verdad, de verdad,el auténtico: ¡Aldeafuente!
Un fuerte abrazo
Cuando visité Gaztelueta por allá en el año 1999 me quedé encantado de lo bonito que es. ¡Cómo extraño Bilbao!.
Don Enrique, como sigue su hermana. Seguimos encomendandola
Los de Munabe no celebramos vuestras efemérides, demasiados piques.
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