lunes, 7 de octubre de 2019

La Virgen del Rosario



El viernes pasado celebré Misa en el colegio para los niños de quinto de primaria y, como es habitual, hice una breve homilía más o menos dialogada.
Hablé del Rosario. Comencé enseñando el mío para explicar su "manual de instrucciones". Luego les conté algo de la batalla de Lepanto, y, por último, hice una incómoda pregunta:
—¿Cuántas avemarías seguidas seríais capaces de rezar sin distraeros?
A los diez años a nadie le da vergüenza exponer en público cuestiones tan íntimas; pero me llamó la atención la sinceridad y la claridad de las respuestas.
—¡Dos! ¡Tres! ¡Yo una y media!
El más lanzado aseguró que era capaz de rezar cinco. Y yo me uní a la chiquillería diciendo la verdad; que casi nunca consigo rezar un misterio sin que se me vaya el santo al cielo un par de veces.
A continuación expliqué que el Rosario se parece a una canción que cantamos a nuestra Madre. La letra son las avemarías; la música, cada una de las escenas que se contemplan en los misterios. Cuando uno canta, es importante no perder el tono ni el ritmo de la música; la letra importa menos. Por eso, mientras recitamos las avemarías, nos "distraemos" pensando en la Virgen. Ella no se cansa de recibir piropos y nosotros estamos la mar de contentos mirando a María.
Ni que decir tiene que no me saqué todo esto de la manga. San Josemaría Escrivá nos contó el secreto.   

10 comentarios:

Pablo dijo...

Volvió a salir el corregidor de Castilla. "El viernes pasado celebre".
A mí de Lepanto (creo que era en Lepanto) me gusta la anécdota del "Cristo Matrix". Ese Crucifijo que al venir la bola de un cañón se movió para esquivarlo.

Antuán dijo...

Esta mañana cuando me di cuenta que era la fiesta de la Virgen del Rosario, antes de ir a la Santa Misa, me cambié de indumentaria. No es que fuera mal. Me me puse la última camisa que me compré en Carrefur porque me parecía que Ella se lo merecía y yo estaría más a gusto en presencia de Dios. Aprovecho este parón del día. Y esta tarde acompañaré a rezar el rosario con una persona en la residencia de ancianos. Que son los preferidos de Dios junto con los niños. Adiosle

Enrique Monasterio dijo...

Esta vez me comí elacento para ponerte a prueba. Creo que te contrataré como buscador de errutas, quiero decir de erratas

Isabel dijo...

Y usted se ha comido mi comentario entero otra vez.

Enrique Monasterio dijo...

Tienes razón. Isabel. Enterito.

Pablo dijo...

También, además del comentario de Isabel de ha usted comido el espacio entre el y acento😂😂😂

Alejandra dijo...

Os recomiendo una peli de Juan Manuel Cotelo: Tierra de María,( Mary's Land) la venden por Amazon y no es cara. Ahí aprendí a rezar el Rosario, no quiere decir esto que lo rece bien,¡¡qué más quisiera yo!!.

Pablo dijo...

Y, para mayor INRI, me he confundido yo de letra. Aciago día para la ortografía.

Antuán dijo...

Hola acabo de llegar de la residencia y me lleve la armónica para ambientar. Mientras paseábamos con la silla de ruedas más de uno dijo: que bien suena eso. Y eso que solo se cuatro canciones y lo que me invento. Una a la Virgen, la de. Caminando hacia el oeste, y la del hombre del piano. Y poco más. Pero es que hacia una tarde buenísima. Había muchas familias. Hay que pararse con la gente que agradece una sonrisa o que escuches cuatro veces lo mismo. Virgen del Rosario. Salud de los enfermos. Virgen de la Soledad. ¡Cuantas advocaciones!
Adiosle

Carmen dijo...

Aunque no consiga rezarlo sin distracciones,con el Rosario le pido ayuda a Ella para las pequeñas batallas de cada dia