sábado, 12 de enero de 2013

Ya estoy aquí

Después de veinte días en la Costa de la Sidra, dos en la Urbe y tres en Pampaluna, he regresado a Vallecas lleno de grandes deseos y pequeños propósitos.
En Pampaluna me encontré con don Fernando Acaso, mi tío adoptivo, que andaba por la clínica universitaria animando a los enfermos. Además descubrí un par de tesoros:
  1. El pincho de tortilla del bar "La Navarra", de la calle Amaia. Una conocida filósofa, experta en la materia, me introdujo en el local a las 7 de la tarde del día 8. Todas las mesas rebosaban de tortillas en su punto.
  2. El día 9 retrocedí a la infancia para comprobar cómo puede consolar un corazón atribulado una modesta taza de colacao caliente en la calle Carlos III. 
También visité el Corte Inglés en rebajas. Me las prometía muy felices disfrutando con el tradicional espectáculo de la lucha libre entra las compradoras por hacerse con los trapitos a la venta; pero nada de nada. La crisis ha llegado también al más grande de los grandes almacenes.
Además escribí tres correos electrónicos: a Juan Pablo I, a Harry Potter y a Neil Armstrong. Irán saliendo poco a poco en la nueva sección fija de "Mundo Cristiano".
--No te ha quedado muy espiritual esta entrada, colega.
--Eso lo dices porque no has probado el pincho de tortilla de La Navarra. 

 

 

5 comentarios:

Rocky Balboa dijo...

Estoy impaciente por leer los mails que por bien no vengan...

Sonia dijo...

Qué bueno de verle , leerle, de nuevo.

Miriam dijo...

qué alegría¡

Papathoma dijo...

Olé por la pausa, le ha cundido!
Me alegro un montón por todo lo que cuenta...y sin ir a Salamanca!!
;)

Vila dijo...

Me alegro de su vuelta con fuerza renovada.

Y para cuándo el libro sobre el Cielo de D.Fernando? y los suyos?
Habrá que dar un tirón de orejas a la editorial...