miércoles, 26 de noviembre de 2014

Poemas nocturnos

Me gustaría tanto bañarme en ese río,/ con sus aguas tan fieles y apacibles:/ esa frescura casi milenaria/y el sol enrojeciendo mis mejillas./ El río es para mí y yo soy para el río:/siempre las mismas ondas complacientes. ("Maldito Heráclito")

Ayer me enfadé con Adaldrida.
Eran las once de la noche y, tras una jornada bastante complicada, decidí acostarme después de echar una rápida ojeada al correo.
Allí estaba ella, metida en mi buzón, con un clip y un poemario nuevo: "se lo mando —escribía— para que vea cómo evoluciona".
Me dije que lo leería más adelante:
—No son horas para navegar entre versos, Rocío. Se me cierran los párpados. ¿Por qué me haces esto?
Descargar.
—Vale, lo descargo y guardaré el archivo en el IPad para mañana…  Me gusta el título.
—Tampoco te va a pasar nada si lees uno o  dos poemas —me insinúa Kloster—.
—Bueno, uno cortito…
Recuerdo a mi amigo Jorge que con los años se volvió muy goloso y siempre comía "un pastel pequeñito" cuando veía la bandeja de los dulces. Al final eran cinco o seis…


A las dos de la mañana termino el último verso: "el insomnio más fértil de la tierra", dice.
No sé si mi insomnio será fértil pero puedo afirmar que Rocío Arana nos prepara un banquete delicioso…, ¿para Navidad?
        
 

3 comentarios:

Churrinche Oriental dijo...

Con semejante recomendación... ¡seguramente vale la pena!

Me sucede cosa semejante con los relatos de C. S. Lewis: si agarro uno no puedo parar hasta terminarlo, por lo que trato de mantenerme alejada de los mismos después de la caída del sol...

¡Saludos!

Papathoma dijo...

Felicidades, Adaldrida.
Con semejante promotor, no dudo de la calidad del poemario que preparas..
El que acompaña el texto de D. Henry -o viceversa- me ha cautivado .

Adaldrida dijo...

Siento mucho haberte robado horas de sueño... pero ¡¡¡Gracias por el post, no me lo esperaba!!!
Será para el año que viene, que tengo que acabarlo y publicarlo...