sábado, 8 de septiembre de 2007

Dudas maternas


Me pregunta mi madre:

—Esta cocina está en mi casa, ¿verdad?

La miro con desconfianza. ¿Será posible que le empiece a fallar la cabeza a una jovencita de noventa y poquísimos años nada más?

—Sí, claro. ¿Por qué…?

—…y mi casa está en Las Arenas, ¿no?

Se le ha puesto cara de guasa. No parece que se trata de un ataque de demencia.

—Bueno, sí.

—¿Y Las Arenas está en Vizcaya, y Vizcaya en España, y España en la Tierra…?

—Oye, ¿a dónde vas a parar?

—Y, si la tierra está en la galaxia, y la galaxia en el universo…, ¿se puede saber dónde está el universo?

—Bueno, pues verás…

—Porque para estar en algún sitio siempre es necesario un lugar mayor en el que situarse, ¿o no? ¿O será que el universo no está en ninguna parte?

Me quedo desconcertado. Ella se sienta en el sillón y coge uno de los cinco libros que está leyendo simultáneamente.

Es evidente que me estoy haciendo mayor.

7 comentarios:

María dijo...

¡¡que crack!!

Anónimo dijo...

¿Hay algo que engrandezca más al ser humano que su capacidad de hacerse preguntas? Siempre pensamos que el mérito está en encontrar respuestas pero lo que ha ido cambiando continuamente el curso de la historia han sido las preguntas de alguien. Tu madre no es sólo mayor sino también muy grande.

Un abrazo fraterno

Bernardo dijo...

La Tierra está en el Sistema Solar, el Sistema Solar está en la Vía Láctea, la Vía Láctea está en el "Grupo Local", y así iremos tirando.

"Universo" es sólo una forma bonita de llamar a "todo lo demás". Al final, el Universo es sólo lo que alcanzamos a ver. Cuando podamos ver "más allá", eso también será Universo.

Por eso el Universo no "está".

Anónimo dijo...

Admirable pregunta de la madre. Me atrevo modestamente a añadir que el "lugar", las coordenadas, son nociones que sólo tienen sentido dentro de nuestro mundo físico. Por eso, como bien dice Bernardo, el Universo no "está", sino que es la condición de todo "estar". Y añado: cuando escapemos con la muerte de estas coordenadas espacio-temporales, ya no "estaremos" en ningún lugar, sino que "seremos".

Juanan dijo...

Admiro a su madre. ¡Qué tía!

Rosie and the Lilies dijo...

Está claro que detrás de cada gran sacerdote hay una gran madre :-)

Anónimo dijo...

D.Enrique, le he dado el Thinking Blogger Award, si se pasa por www.seraudaces.es verá porqué
un cordial saludo
Anibal