Un poema de Carlos J. Morales
Carlos Morales, poeta y amigo (no sé en qué orden poner estas dos palabras) acaba de abrir su página web. Como bienvenida, le robo un poema inédito que bien podría titularse "autorretrato".
El paseante
Apoyaba su oído en la negrura
de todas las fachadas más viejas de mi pueblo.
Caminaba despacio y se miraba
en los charcos de lodo del Parque del Retiro.
Y siempre que podía hacía una pausa
en los puestos de fruta al aire libre.
En los días de lluvia sonreía
y contaba las gotas de todos los cristales.
No quería mirar al sol de frente
en las tardes de agosto: le bastaba
con el ardor sediento del asfalto.
Le daba miedo el mar: como los niños,
quería tocarlo todo y se inquietaba
al ver el horizonte siempre lejos.
Le faltaba la luz y el aire y el sonido.
Buscaba a Dios por todas las esquinas.
1 comentario:
¡Que poema más bonito!, ahora mismo entro en su página.
Se preguntaba usted, D. Enrique si los hijos leerían nuestro blog; pues bien, no solo lo leen, sino que como el 5ºB es también su casa, también publican. Es verdad que antes te dicen : "cualquier día publico yo algo" y de repente, allí está.
Un saludo y gracias nuevamente por descubrirmos este poeta.
María Jesús
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