Llegué a Pamplona con el tiempo justo para entrevistarme con un viejo profesor lleno de sabiduría. Aparqué de milagro en la Plaza Conde de Rodezno y busqué una farmacia. Tenía una a dos pasos.
No había clientes. La farmacéutica, una mujer encantadora de unos 50 años, me escuchó con atención, se interesó por mi antecedentes clínicos, me dio la medicina adecuada, precisó la dosis que debería tomar e hizo un pronóstico alentador:
-Mañana mismo se le habrá pasado.
Luego añadió:
-Con el descuento de sacerdote, esto le sale por...
-¿Tenemos descuento los curas?
-Aquí somos practicantes y bastante se meten ya con ustedes.
-Muchas gracias y acuérdese de rezar un poco por nosotros. Ya sabe que Estamos en un año sacerdotal
-Desde hace años rezo por ustedes...
(Ni que decir tiene que mi achaque no tenía importancia y ya se ha curado)
7 comentarios:
TODO ES POSIBLE EN NAVARRA!!!!
Claro que si,se lo dice una de ellas.
GRACIAS
Que buenos recuerdos de esa Plaza, le llamaban la "Plaza Roja" por las edificaciones. La farmacia supongo estará cerquita de la Iglesia de Cristo Rey.
Navarra era mucha Navarra.
Quovadis
Será que les consideran "familia numerosa"... como tanta gente les llama "padre" ;o)
¡Qué maja!
¡Guau! ¡me he quedado muerta! qué impresión, me alegro por usted y me alegra el que exista gente tan buena por el mundo...
Enhorabuena Dn Enrique!, con ese descuento podrá comprar más pijamas de setenta euros. (Lamento el sarcasmo pero no me puedo sacar de la cabeza que haya pagado tanto dinero por un pijama)
Samo, ¿de que vas?
Es posible que hagas este comentario?
Caray, caray ¿que cosas tiene la vida?
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