Enrique García-Máiquez escribe hoy sobre una cuestión de actualidad. Vale la pena leerlo en el Diario de Cádiz. Empieza así:
EN principio, no tenía demasiado que celebrar de la reforma del aborto. Es una ley que lo sigue amparando y eso resulta incompatible con cualquier alegría. (Continuar)
11 comentarios:
Me ha gustado mucho la frase de "El aborto es un derecho de nadie".
Sales a la calle ,hablas con miles de personas durante muchos años y nadie justifica el aborto.
Y entonces aparecen,chillando .
Son cómo las guerras o los huracanes incontrolados,altamente destructores,que quieren hacerse notar al ser humano,con la violencia tipica de la muerte sin sentido,
Yo pienso igual... la nueva ley está incompleta, pero mejor eso que lo que teníamos hasta ahora. Al complicar un poco el proceso que hay que seguir, igual más de una mujer o más de dos se lo piensan y, bueno, pues así ya tenemos dos vidas más en camino, que no es poco.
Por desgracia, creo que tendrán que pasar muchas generaciones aún hasta que nos vean como unos bárbaros asesinos.
Antes de ser aprobada esta Ley, sólo leía y oía críticas duras -y razonables- en contra, aparte de la tardanza en sacarla a la luz, que hacía temer que se quedase en una promesa electoral incumplida más.
Pero he aquí que la aprueban....y los abortistas se desquician , gritan, amenazan, se manifiestan...¿es que ellos sí han entendido que esta es la puerta pequeña por la que se colará el espíritu del cambio?
Ellos sí ven que abre el paso a un cambio de mentalidad: se pasa de considerarse un derecho de la mujer...a un delito del que la mujer es víctima la mayoría de las veces.
Enhorabuena a los valientes que han dado el paso. No es bueno para su carrera política, pero miles de mujeres y sus hijos les estarán siempre agradecidos. Ellos pasarán al libro de Oro de la Historia, se estudie. o no en los manuales.
Es una suerte que haya gente que escriba como este hombre: acertado, directo y breve.
...y fíjese, don Enrique que, precisamente hoy, me he llevado toda la tarde en el hospital con mi cuñada, que ha roto aguas esta mañana y está esperando su segundo hijo (mi sobrino, mi ahijado); y acabo de escribir en Twitter que no hay nada más hermoso que el rostro de una mujer después de dar a luz; TODAS se ven preciosísimas.
Llevo toda la tarde viendo a gente paseando por los pasillos, esperando con nervios, pero muy felices; gente exultante tras el nacimiento de sus hijos; familiares, amigos, vecinos... atentos a cada sonido de sus móviles con la noticia de que "ya está aquí"... TODO era por allí alegría y esperanza... y me ha dado por pensar cómo serán, por contra, las salas de espera de las clínicas abortistas: silenciosas, frías, tristes...
Cuando me he vuelto a casa (después de llegar el relevo), he pasado por la capilla del hospital, me he acercado al Niño Jesús, le he dado un beso en la rodilla y le he dicho "cuídame bien a mi sobrino, ¿vale?"... Y aquí estoy ahora en casa, con nervios, pero con una paz inmensa.
Hay que rezar mucho por esos que Enrique García Máiquez dice que "gritan enfurecidos". A veces hace más bien una sonrisa que un sermón serio y meditado.
Queridos amigos del globo, yo tambien celebro que se despierten las fieras " ladran luego avanzamos" aunque tambien estoy de acuerdo que es una ley menos mala que la que habia, pero continua siendo mala, por que no tapona del todo el genocidio del aborto en España 98.000 niños todos los años al contenedor de basura.
Yo personalmente cuando la gente habla de derechos, pienso y ¿ donde esta el derecho fundamental que es el derecho a la vida? del cual emanan todos los demas derechos civiles...
Pues bien los que defendemos la vida somos llamados " ultras,fachas,intolerantes y muchas mas lindezas.
Pero los que difienden la muerte son progresistas, pues bien centrandome solo en España cada vez que han gobernado los progresistas , han dejado el pais arruinado economica y moralmente, con un monton de pobreza y un reguero de sangre 100.000 abortos al año. Estos son los progresistas !!!
Me alegro mucho que salgan a la calle señores progresistas .
Un abrazo
Hay algo de esta propuesta que me gusta y que en las anteriores no teníamos en cuenta y los católicos teníamos que callarnos ante la crítica de los pro-abortistas.
¿Hay que penalizar judicialmente a una mujer que aborta? ¿Hay que meterla en la carcel?
Ante esa pregunta, mi respuesta era lógica. "No. La mujer es una víctima."
Esta ley, da la vuelta a la legislación que habíamos tenido hasta ahora. La mujer no irá a la carcel por abortar. No tendrá una sanción económica. No será juzgada en un juzgado.
Respecto a los casos aceptados, prefiero callarme. Total, las críticas que se puedan hacer, no van a valer para nada. Es lo que tiene la mayoría absoluta.
Eso si.... Y metiéndome en terreno fangoso: si alguien se creía que esto era una promesa electoral a cumplir...... que se gradue la vista.
Cómo me entristece el tema del aborto y la forma tan a la ligera como se está tratando. Cada uno arrima el ascua a su sardina: unos, piando sin argumentos, otros, arrogándose autoridad moral y científica, los de más allá, provocando polémica a la espera de propinas electorales, y hasta una ministra francesa enmendándonos la plana...
He empezado a sentir miedo al oír cosas como "mi bombo es mío" como argumento y dicho con fanatismo, fiereza y encono.
Ideología, religión, conciencia, se mezclan y no somos capaces de enfrentarnos con cordura y sosiego a un tema tan delicado. ¡Y a punto de entrar en el año 14 del siglo 21...!
Cuando escuché por primera vez el latido del corazón de mi "bebé"... ¡Dios, no hay palabras que puedan describir esa maravilla! Aunque también es posible que todas las mujeres no sintamos lo mismo ante ese milagro. ¿Es posible?
Gracias por sus letritas D. Enrique, aunque hay temas que se las traen...
Si el aborto espontáneo te genera una pena horrible.q será Cdo es probocado....tantas familias q querrían adoptar.
dicen que nunca es tarde si la dicha es buena. Demos gracias a Dios por las vidas que se pueden salvar cuando esta ley se apruebe. Pidamos por tanta alma inocente a la que no se le está dando la oportunidad de disfrutar del regalo de Dios, la vida.
Y que Él perdone este sinsentido del que algún día nos avergonzaremos todos.
Hace muchos años, en una revista médica comparaban los típicos argumentos que se daban a favor de la esclavitud y a favor del aborto. Uno de ellos era: "Si no quiere usted tener esclavos, nadie le obliga a ello, pero no imponga su moralidad a los demás" / "Si no quiere usted abortar, nadie le obliga a ello, pero no imponga su moralidad a los demás".
Como, afortunadamente, la esclavitud se abolió, todavía tenemos esperanza de que algún día se acabe también con el aborto. Esperemos que no tarde mucho.
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