domingo, 25 de abril de 2010

e-mail



Aurelio Mendiguchía, aquel amigo mío que se comió un bocata de mejillones en la Clínica universitaria de Navarra mientras le autotransplantaban la médula, ha escrito una novela de Ciencia fruición, titulada "e-mail".

No, Gaztelu, no: no es una errata. Las novelas de ciencia ficción algunas veces son un ladrillo insoporteibol. Las de ciencia fruición, en cambio, se leen de un tirón, con deleite y regodeo.

La cosa va de un profe de enseñanza media (como Aurelio) que recibe un e-mail del futuro y ya, de paso, aprovecha para salvar a la humanidad en compañía de unos alumnos. No sé si Aurelio aprovechó su estancia en la clínica para escribir su novela. A mí me ha encantado.

Claro que los analfabetos en informática no entenderán mucho. Pues que aprendan.

5 comentarios:

Isa dijo...

¡¡Qué chulo!! tiene una pinta buenísima; voy a emepzar a recomendarlo a mis alumnos y a pedirlo a la bibliotecaria...que a veces sólo trae librillos regulares...

Andrés dijo...

Primera noticia que tengo, ignoraba que se pudiera comer en el quirófano...

Acabo de leer el M.C. de este mes (no me ha dado la vida para hacerlo antes) y me ha dejado con la intriga, ¿qué pasó con la paloma?

Un saludo desde Itxaropena.

Enrique Monasterio dijo...

No, hombre... No fue en el quirófano. Lee mi entrada "un bocata terapéutico" de hace veinte días o así.
¡Ah, la paloma! Quién sabe

Andrés dijo...

Ah, acabo de rememorarlo, lo cierto es que nos fijamos más en la atención de las enfermeras que en el bocata en sí. (Por cierto, un abrazo muy fuerte a Aurelio...y unas oraciones, que nunca vienen mal.)

Otro saludo (de regalo)

GAZTELU dijo...

La verdad es que no "pillo" lo que me quiere decir D.Enrique,recuerdo perfectamente esa entrada en la que aludimos al cariño del personal sanitario de los hospitales.
Recuerdo tambíen que dije que me gustaban más lo bocatas de calamares que me comía cuando era joven.
La verdad es que me ha sorprendido ver mi apellido en su entrada,no soy digna de ello.
Solo añadirle que me leí en mi último viaje,que prefiero no recordar,atrapada en escocia,bajo la nube tóxica del volcán,el libro que usted recomendó,a saber:
BLANCA COMO LA NIEVE
ROJA COMO LA SANGRE
Me encantó,lo recomiendo vivamente y también me reí mucho como usted.
Gran novela con muy buen mensaje.
GRACIAS