miércoles, 9 de septiembre de 2009

Mejoría

No os he dicho que nuestra amiga mejora poco a poco. Me refiero a la antigua alumna..., ya sabéis. Hay que seguir rezando para que se produzca un cambio de ritmo y para que ella no se canse, para que tenga paciencia y ofrezca sus achaques por sus intenciones y por las de todos. Ahora es muy poderosa.

Pronto saldrá de boxes con alguna pieza nueva, con el motor engrasado y las tuercas bien apretadas.

No como Alonso, que siempre le dejan un tornillo a medio poner.


11 comentarios:

Anónimo dijo...

Me sigo acordando D. Enrique

ARdV dijo...

Si la ve, dígale que dentro de sus intenciones meta una más... por una amiga mía que le han dicho que su hija de 7 años tiene un cancer terminal, un tumor en la base del cerebro, inoperable... no le dan más de 6 meses. La pobre se ha peleado con Dios, dice que no vuelve a creer si no ve un milagro, que Dios es malo, etc. etc. Para que vea que los milgaros no siempre son que la gente se cure, que hay que tratar de ver más alla.... gracias!
Y dígale que desde Guatemala se le encomienda, si de algo sirve.

Isa dijo...

Cuándo me alegro de que mejore, ¡a rezar más!

FJ dijo...

seguiré rezando, en breve estará preparada para dar la vuelta rápida.

Luis y Mª Jesús dijo...

haber, haber...

Anónimo dijo...

Pues dígale que rece por los que lo hacemos para que mejore...ahora, como usted dice, es una privilegiada.

Anónimo dijo...

Me alegro mucho de que esté mejor. Seguiremos orando por ella y por la niña que comenta Andrea.
¡Cuantas necesidades!
Confiemos en el Amor de Jesús.

paloma dijo...

¡Cuánto me alegro don Enrique!

ROSA dijo...

A nuestra compañera de blog:
"Cuando no puedas correr, trota;
cuando no puedas trotar, camina;
cuando no puedas caminar, usa el bastón; pero nunca te detengas"
(Teresa de Calcuta)
Sigo recordandote en mis oraciones.
¡¡¡ANIMO MUCHACHA!!!

Anónimo dijo...

Un sólo corazón y una sóla alma... Cuando rezamos todos unidos, las cosas mejoran. Es que Dios es misericordioso y generoso.

Bernardo dijo...

Mucho ánimo a nuestra amiga, aunque no la conozcamos.

Dígale que no los llaman "pacientes" por casualidad.