lunes, 10 de septiembre de 2012

La máscara



Marta tiene 16 años, pero después de verla disfrazada para la boda de su prima, más repintada que el Ecce Homo de Borja, ocultando bajo el maquillaje su espléndida adolescencia y tratando de representar el papel de dama glamurosa, turbiamente impúdica, comprendí aquello que escribió Kloster:
“La moda es tan tirana que nos obliga a hacer el ridículo para no quedar en ridículo”

7 comentarios:

Relicary dijo...

Jajajaja, solamente hay que echar una mirada hacia atrás y de repente mi tía dice "¿pero cómo pudimos llevar esas hombreras?" "¿y esos pelos?"

Y hoy voy por la calle y veo a gente vestida de tal modo que pienso que si en mi época de colegio hubieran ido así, los demás les habrían hecho la vida imposible, por decirlo suavemente.

Elena Trius dijo...

¡Cierto! No nos damos cuenta del ridículo... Cuando en el fondo se puede ir elegantísimo y a la vez no parecer un monigote.

Anónimo dijo...

11El secreto está en la mirada.

Si no te miran a los ojos, irás de lo que sea pero no de Señora/ señorita...atrayendo al ganado "ad hoc"

Y además, lo único que se pesca es "el fresco", el del resfriado y el que te pide el teléfono.

Lo tengo comprobado: hasta el mayor de los buitres, cuando ve a una señora le mira a los ojos.

Además, se liga mucho más: están más que aburridos de ver piernas y escotes y nadie quiere algo "del montón"- (salvo los mindundis claro)

Anónimo dijo...

Padre, pobre chica, no sea tan duro que esas etapas felizmente pasan! Hay que ir creciendo un poco mas para darse cuenta.
Cariños

Almudena dijo...

Sinceramente, no creo que nadie pueda ir más pintado que el Ecce Homo de Borja. Salvo eso, ha estado sembrado

Alguien dijo...

Si de verdad quieren tener un novio y marido que les quiera por lo que son por dentro y no por lo que enseñan, les daría igual ir un poco más normales, aunque luego siempre hay grciositas que se burlan de las que van bien...

Cordelia dijo...

Alguien: si conservas las ideas así de claras, vas a ser una mujer de bandera. Olé mi chica!
Almudena, si tú supieras...