Junto al colegio electoral, la policía da toda clase de facilidades para estacionar el coche en lugares habitualmente prohibidos. Yo lo dejo en un paso de peatones.
―Procure darse prisa, caballero.
El agente de la ley está ayudando a una señora que trata de subir con esfuerzo el único peldaño que se nos separa del gran salón donde están las urnas. Lo veo tan solícito y amable que le perdono que me llame “caballero”.
No necesito detenerme para consultar el censo ni para meter las papeletas en los sobres. Ya hice los deberes en casa. En la mesa hay tres mujeres: la presidenta, que es una jovencita rubia y amable, y dos vocales con cara de aburrimiento. Una de ellas examina atentamente mi carnet de identidad, me mira y me dice con tono de reproche:
―En la foto se le ve más joven.
―Es que al natural uno pierde mucho.
Un interventor de “Izquierda Unida” aparece un con botellín de agua y se lo entrega a la presidenta. Meto los sobres en la urna, pero la vocal, que es lenta y un tanto torpe de movimientos, no se decide a devolverme el carnet.
―¿Es usted de Maldonado?
―Pues no, lo siento.
Ha comenzado a llover. Entro veloz en el coche y rezo el ángelus antes de ponerlo en marcha. Luego oigo las noticias, que son pocas y monótonas. Hablan de los que han ejercidosuderechoalvoto en lagranfiestadelademocracia.
El guardia me invita a aligerar. La liturgia civil de la fiesta ha terminado. Podemos ir en paz.
5 comentarios:
Usted lo ha dicho: la gran fiesta de la Democracia. y muchos pasan del tema. yo acabo de ir tenemos que fregar todo a mano porque el lavaratos se estropeo justo hace dos dias, no se si tendrá arreglo. pero la situacion que nos ocupa me pregunto ¿la tendrá? por lo menos hay que tentar a la suerte. solo nos queda esperar. Adiosle
Tiene gracia, la gran fiesta de la democracia el día de Cristo Rey
No está mal. Aquí todos a ejercer el derecho, que ya casi es un deber y una responsabilidad. Veremos que pasa esta noche. Yo me enteraré mañana porque tengo que irme pronto a la cama, que toca madrugar.
Total, no creo que mis sueños influyan en los resultados.
Además, votar me da el derecho a quejarme un poco :)
Pues aquí ni facilidades ni gaitas. Tenemos que dejar el coche en lugar prohibido por inicitiva propia. También es verdad que aquí la policía brilla siempre por su ausencia.
Demos gracias a Dios.
Y ahora, ¡a trabajar!
Un saludo.
Publicar un comentario