domingo, 24 de mayo de 2009

Eficacia policial


El prof. Ortigosa me envía este relato. Ignoro si es él el protagonista.


Yo tengo un sueño muy ligero, y una de esas noches noté que alguien caminaba sigilosamente por el jardín de mi casa. Me levanté en silencio y desde la ventana del baño logré ver una silueta que entraba en el jardín y se acercaba a la casa.

Como mi casa tiene en las ventanas y cierres internos en las puertas, no me preocupé demasiado, pero tampoco iba limitarme a contemplar al ladrón, así que llamé bajito a la policía, informé la situación y les di mi dirección. Me preguntaron si el ladrón estaba armado o si ya estaba dentro de la casa. Aclaré que no y me explicaron que no había ningún agente cerca para ayudar, pero que mandarían a alguien en cuanto les fuese posible.

Un minuto después telefoneé nuevamente y dije con voz serena:

—Hola, hace un rato llamé porque había alguien en mi jardín. Pueden estar tranquilos. Ya maté al ladrón con un disparo de escopeta calibre 12, que tengo guardada para estas situaciones. ¡La verdad es que el tiro le hizo un desastre al tipo!

Tres minutos, había en mi calle 5 coches de policía, un helicóptero, una unidad de rescate, un equipo de TV, y una asociación pro derechos humanos, que no se perderían esto por nada del mundo. Entre todos agarraron al ladrón in fraganti ante su asombro. Tal vez él pensase que era la casa del jefe de policía.

En medio del tumulto, un comisario se aproximó y me dijo:

—Creí que había dicho que había matado al ladrón.

Yo contesté:
—Creí que me habían dicho que no había nadie disponible.

6 comentarios:

Isa dijo...

¡¡Muy bueno!!
¿De verdad trabajan así nuestros policías? qué penita...

Anónimo dijo...

No sé si será verdad o lo ha imaginado muchas veces pero...da un poco de miedo.
Yo creo que la policía hace más de lo que debe pero no están respaldados por nadie y los ladrones se ríen de ellos cuando al día siguiente salen de las comisarías.
Supongo que ese el problema.

yomisma dijo...

Hace unos años compramos nuestra primera casa en North Carolina. Era la primera vez que teníamos una vivienda unifamiliar rodeada dejardín y, por supuesto sin vallar. Una noche que mi marido estaba de viaje, oí un ruido de pasos en el porche. Sería la 3:30 am. No sabía a quien acudir y llamé a mis padres que en España, estaban tomando el desayuno. Mi padre me aconsejó llamar a la policía. Y así lo hice. La operadora que me atendió no me dejó colgar el teléfono hasta que llegara la policía. Esto ocurrió en menos de tres minutos. Con el agente de policía fuimos mirando toda la casa cuarto por cuarto y él dió una vuelta a la casa antes de irse. No encontró nada ni nadie. decidimos que debía haber sido un animal. Al finalizar le dí las gracias y le pedí disculpas por molestarle a esas horas. El me contestó que no me preocupara, que para eso estaban, y que si volvía a tener miedo, volviera a llamarles, que mis impuestos cubrían el costo de todas las visitas que necesitara.
Igualito que en Madrid, verdad?

Altea dijo...

A mí me lo enviaron en power point hace un tiempo, es muy bueno. Y, lamentablemente, muy real.

GAZTELU dijo...

A mi tambien me lo enviaron hace tiempo, suscribo totalmente el comentario de ALTEA
Gracias y buena semana a todos

Anónimo dijo...

La señal de prohibido es genial.

Lo que cuenta yomisma ya lo había escuchado, que en USA la persona honrada tiene las de ganar. Me gusta saberlo directamente de gente que vive allí. Porque aquí únicamente nos enteramos de las barbaridades de los policías racistas (como si por aquí no tuviéramos policía corrupta y maltratadora). A cada uno lo suyo.